París: Librería Shakespeare and Company

La Librería Shakespeare and Company es, casi con toda seguridad, la librería más famosa del mundo tanto por su historia como por su ambiente acogedor en el que se puede ir a su antojo sin que nadie le llame la atención. Es también una biblioteca especializada en literatura anglosajona, en la que uno, en el 2º piso, puede sumergirse en la lectura de un libro, donde un letrero comunica: “A partir de aquí los libros no se venden, están a tu disposición para que los cojas y los leas todo el rato que te apetezca”.

El 1er piso sirve también como refugio para los viajeros, conocidos como tumbleweeds, hospedados a cambio de algunas horas de trabajo en la librería cada día. La planta bajo dispone de un “wishing well”, o pozo de los deseos al que los visitantes suelen arrojar monedas.

Shakespeare',_Centre_Paris_IISu historia se inicia en la década de los 1920 con Nancy Woodbridge Beach más conocida como Sylvia Beach, quien la regentaba en la calle Odéon, nº 12, siendo la primera en publicar la obra de James Joyce, “Ulises”.

Durante esa época era el centro de la cultura anglo-americana en París, visitada por escritores de la llamada “Generación perdida”, escritores americanos que vivieron en París desde la I Guerra Mundial hasta casi la II GM, como Francis Scott Fitzgerald, Ernest Hemingway, Ezra Pound, Gertrude Stein y James Joyce; incluso Terenci Moix pasó varias noches aquí. El contenido de la librería era considerado de gran calidad y reflejaba los gustos literarios de Sylvia Beach. Shakespeare and Company, así como todos sus habituales, son mencionados continuamente en A Moveable Feast de Hemingway. Los clientes podían comprar o tomar prestados libros como el controvertido El amante de Lady Chatterley de D. H. Lawrence, que había sido prohibido en Inglaterra y en los EE.UU.

En diciembre de 1941, durante la ocupación alemana, tuvo que cerrar su sede porque, según se cuenta, Sylvia Beach se había negado a venderle Finnegans Wake, el último libro de Joyce, a un oficial alemán. Se le arrestó y se le internó 6 meses en un campo, y la librería fue cerrada.

Hacia los años 1950 se volvió a abrir en la dirección actual: el nº 37 de la calle Bûcherie.

En 1962, Sylvia falleció y fue la librería comprada por el americano George Whitman, convirtiéndola en uno de los puntos neurálgicos de la cultura literaria mundial.

J.A.T.

Esperamos que haya sido de su agrado el artículo: París: Librería Shakespeare and Company