El Palacio de Gaudí, de estilo neogótico, es el Palacio Episcopal de Astorga. Está construido con granito del Bierzo, con apariencia de castillo y rodeado por un foso.

Desde 1962 acoge el Museo de los Caminos, dedicado al Camino de Santiago. Tiene piezas de arte religioso, como algunas tallas románicas, o una colección de orfebrería de los siglos XV-XVIII. También alberga objetos arqueológicos de las épocas romana y medieval. Posteriormente, en 1967, se le declaró Bien de Interés Cultural.

El antiguo palacio episcopal fue construido, probablemente, hacia el siglo XII, en el terreno que donó la reina Urraca I de León. Joan Baptista Grau i Vallespinós fue nombrado obispo de Astorga por el papa León XIII; pero el 23 de diciembre de 1886, tras dos meses de estar allí, un devastador incendio lo destruyó por completo.

Antonio Gaudí

Como el obispo de Astorga era paisano y amigo de Antonio Gaudí, le encargó a este que diseñara su reconstrucción. Para ese tiempo, Gaudí estaba inmerso en varios proyectos barceloneses, entre ellos, la Sagrada Familia, el Palacio Güell y sus pabellones, por lo que no podía desplazarse hasta Astorga. Por ello, le pidió al obispo que le remitiera información sobre el lugar, fotografías y dibujos, a partir de los cuales empezó a realizar los planos. Al terminarlos, los devolvió al obispo quien les dio el visto bueno y empezó la tramitación de los permisos y el visto bueno de la RABASF (Real Academia de Bellas Artes de San Fernando), dado que sería un edificio público.

Fachada del Palacio de Gaudí (1887)

En diciembre de 1888, tras terminar el proyecto del Palacio Güell, Gaudí visita Astorga para ver in situ el lugar, decidiendo hacer algunas modificaciones. Volvió a visitar las obras en 1890 (2 veces), 1892 (3 veces) y 1893 (cuatro veces).

En febrero de 1889, es aprobado el proyecto, que sale a subasta pública y se adjudica al contratista Policarpo Arias por un presupuesto de 168.520 pesetas.

Se coloca la primera piedra en la onomástica del obispo, el 24 de junio de 1889, y para realizar las obras, Gaudí contrata albañiles y obreros catalanes que ya habían trabajo para él, asegurándose así que todo se haría según sus instrucciones.

Palacio de Gaudí en obras

Aunque se esperaba el proyecto terminar en 5 años, el obispo fallece un año antes (1893). Debido a las discrepancias entre Gaudí y la Junta Diocesana las obras se paralizan y Gaudí dimite de su cargo, expresando: “no serán capaces de acabarlo, ni tampoco de dejarlo interrumpido”.

Casi una década después se intenta que Gaudí retome las obras, aunque sin éxito, dado que la Sagrada Familia tenía prioridad para él. El diocesano y arquitecto, Ricardo García-Guereta retoma las obras, acabándolas el 12 de octubre de 1913.

Durante la guerra civil fue usado como cuartel de artillería y oficinas de la Falange, teniéndose que reparar los daños entre 1943-1955.

Posteriormente, en 1956, se adapta el 2º piso para habilitarlo como su residencia lo antes posible; pero, en 1960, el obispo Josep Castelltort fallece repentinamente, por lo que no llega a concretarse este uso. El nuevo obispo promovió para que albergara el Museo de los Caminos.

En 2014, el Ministerio de Fomento anunció una inversión de 1.800.000 euros en tres años.

J.A.T.

Agradecimientos:

Palacio de Gaudí

Foto cabecera: Javier Montes, CC BY-SA 4.0