PERSONAJES (I)

 

Edward John Smith

Edward J. SmithEl capitán del Titanic tenía 43 años de experiencia, habiendo dirigido 18 barcos. Llevaba 32 años trabajando para la White Star Line. Conocía bien la ruta pues había viajado por el Atlántico Norte por unos 26 años. Este iba a ser su último mando antes de jubilarse, pues deseaba estar más tiempo con su esposa e hija.

Tras recibir aviso del avistamiento de icebergs, ordenó reforzar la guardia. En el momento del impacto no se encontraba en el puente, al que acudió rápidamente. Ordenó valorar los daños, e inspeccionó las cubiertas inferiores junto al constructor del barco, Thomas Andrews, quien determinó que en 2 horas, aproximadamente, el barco se iría a pique.

A partir de ahí estableció las pautas para salvar al mayor número de pasajeros: avisos de socorro, uso del S.O.S., instrucciones para los botes salvavidas. El único testimonio fiable indica que el capitán se dirigió solo al puente, despareciendo junto con el barco. Su cuerpo nunca fue recuperado. Ha quedado como modelo del capitán que cumplió sus funciones hasta el final.

 

Joseph Bruce Ismay

Joseph Bruce IsmayEra el presidente y director de la White Star Line, propietaria del Titanic. Junto con William Pirrie, presidente de los astilleros Harland & Wolff, ubicados en Belfast (Irlanda), planearon la construcción de varios grandes barcos de vapor, que superara en lujo a los que había en ese momento, y que tuviera una 3ª clase –muy económica- para viajar. Esto atraería a los más ricos y a la clase media acomodada. Estos fueron 1) Olympic, 2) el Titanic, y 3) el Britannic, de los que el Titanic sería el orgullo de la compañía, aunque en su primer viaje no llegó a su destino.

La noche del impacto estaba en su suite, la B-52, sin dormir y cuando al sentir la colisión subió al puente y se enteró de lo ocurrido, escuchando de boca del ingeniero Andrews que el barco se hundiría sin remisión.

Volvió al camarote y después salió a ayudar a los pasajeros a embarcar en los botes. Cuando se preparó el bote C para botarlo en el agua, al no haber en las proximidades más mujeres y niños a los que embarcar, él y otro pasajero (William Carter), uno de los oficiales les dijo si querían meterse en el bote ocupando el lugar de miembros de la tripulación, por lo que aprovecharon para meterse en él. Se puso a remar junto a otros 2 marineros. Esto lo atormentó durante su vida, puesto que había más mujeres y niños en el barco, añadiendo que su secretario (William H. Harrison) y su sirviente (Richard Fry) no salvaron la vida y murieron ahogados.

Por esta acción recibió una avalancha de críticas despiadadas. Especialmente la prensa estadounidense lo calificó como uno de los mayores cobardes de la historia. Muchas de esas críticas vinieron de periódicos propiedad del magnate de los medios de comunicación, William Randolph Hearst, del que se decía que lo motivaba una venganza personal contra Ismay.

Ismay donó 11.000 libras para la fundación de una organización que ayudara a la gente perdida en el mar y, en 1919, dio 25.000 libras para crear un fondo y reconocer la contribución de los marinos mercantes en la I Guerra Mundial.

Murió en 1937, de una trombosis cerebral, a los 74 años.

J.A.T.