UN NUEVO CONCEPTO EN LA HOSTELERÍA: EL MOTEL

En los EE.UU., después de la II Guerra Mundial, el coche fue un elemento que rápidamente se incorporó a las familias, lo que las invitaba a viajar por las carreteras todo el país. Por ello, la forma tradicional de alojamiento en hotel tuvo que innovarse: las familias necesitaban un acceso rápido desde la carretera así como un lugar para estacionar el vehículo con facilidad.

Ante esta nueva dinámica, hacia mediados del siglo XX, se crearon los “moteles” (un acrónimo de MOtorist hoTEL), de 1 o 2 plantas, a cuyas habitaciones se accedía a través de un largo pasillo desde la recepción o desde el aparcamiento.

Los primeros moteles eran pequeños, de alrededor de 50 habitaciones; pero poco a poco fueron mejorando su tamaño y su calidad. Hacia 1960, como promedio, un motel tenía unas 100 habitaciones y tenía un aparcamiento reservado para cada vehículo.

La imagen de los moteles ha estado muy difundida en las películas norteamericanas, tanto antiguas como modernas, como el caso de archifamosa Psicosis de Alfred Hitchcock, o Lolita de Stanley Kubrick, Thelma y Louise de Ridley Scott, Pulp Fiction de Quentin Tarantino, Identidad de James Mangold, Un pueblo llamado Dante’s Peak de Roger Donaldson o No es un país para viejos de los hermanos Cohen.

peliculas-motelEn la actualidad, estos hoteles se encuentran en Estados Unidos no solo al lado de las carreteras, sino incluso dentro de las ciudades, ya que el sistema se ha hecho muy popular y permite una gran intimidad y discreción para el usuario. También se han diseminado por todo el mundo copiando en parte el modelo que tanto se ha visto en el cine.

(J.A.T.)

Agradecimientos:

Foto cabecera: Bernard Gagnon, CC BY-SA 3.0

Foto películas:  ColumbiaTristar / Universal / MGM