La Operación Anthropoid hace referencia al atentado contra el Obergruppenführer (Teniente General) Reinhard Heydrich, uno de los más poderosos y temidos dirigentes nazis durante la II Guerra Mundial.
Heydrich era jefe de la Reichssicherheitshauptamt (RSHA), la gran oficina central de seguridad del Reich, la temible telaraña que incluía a todas las agencias policiales y de espionaje. Este organismo agrupaba a:
- Gestapo: Su nombre era la contracción de Geheime Staatspolizei (“Policía Secreta del Estado”). Su función era la de investigar y combatir “todas las tendencias peligrosas para el Estado”. Tenía autoridad para investigar los casos de traición, espionaje y sabotaje.
- SD: El Sicherheitsdienst (“Servicio de Seguridad”), era el servicio de inteligencia de las SS.
- KriPo: La Kriminalpolizei (“Policía criminal”) fue el organismo estatal que se encargaba de las investigaciones criminales.
También fue presidente de la Organización Internacional de Policía Criminal (luego conocida como Interpol). Fue uno de los artífices de la llamada “Solución final del Problema Judío”, organizando la Conferencia de Wansee (20 de enero de 1942), en la que, en 90 minutos, se decidió la aplicación del método de exterminio de los judíos, asegurándose la cooperación de los diversos departamentos para las deportaciones.
Heydrich era una persona ambiciosa, fría y calculadora, hasta tal grado que se decía que, hasta Himmler, su jefe y protector, le tenía miedo. Hasta el propio Hitler lo consideraba como su posible sucesor, definiéndole como “el hombre con el corazón de hierro”.
Fue uno de los organizadores de la famosa Kristallnacht (“Noche de los cristales rotos”), que comentamos en otra entrada -pinchar aquí)- una serie de ataques coordinados contra los judíos de toda Alemania y parte de Austria, la noche del 9-10 de noviembre de 1938. Los ataques fueron llevados a cabo por las tropas de asalto SA y por civiles.
En la Europa oriental fue responsable directo de los Einsatzgruppen, los comandos especiales que acompañaban al ejércitos alemán en su avance y que asesinaron 1.300.000 personas —incluidos comunistas, intelectuales y judíos— por fusilamiento o gaseándolos.
Las envidias e intrigas dentro del partido hicieron que pululara la idea de que tenía ascendencia judía, por lo que se llevó a cabo una investigación sobre su linaje. Aunque salió reforzado como un “puro ario” -siendo rubio con ojos azules-, las sospechas no desaparecieron, lo que es posible que esto motivara su fanático antisemitismo.
Última foto de Heydrich (26-05-1942)
En 1941, Himmler le envió a Praga, nombrándole Protector de Bohemia y Moravia (actual República Checa), para dirigir con mano dura al pueblo checo. Se instaló en el Castillo de Praga y decretó la ley marcial. Según Radio Prague Int., “deportó a unas 1.700 personas a los campos de concentración y realizó 500 ejecuciones” (aunque se cree que el número real fueron unas 5.000), por lo que llegó a ser conocido como “El carnicero de Praga”, además de “La bestia rubia” y “El verdugo de Hitler”. Diezmó la resistencia checa y aumentó la fabricación de material militar.
Despreciaba a la raza eslava, y ese desprecio junto al alto concepto que tenía de sí mismo y del miedo que provocaba le hicieron descuidar su seguridad personal. Así, cada día y a la misma hora, en un Mercedes descubierto, sin blindar y sin escolta, realizaba el trayecto desde su casa hasta su despacho oficial.
Edvard Beneš
El presidente checoslovaco, Edvard Beneš, exiliado en Londres, aceptó la idea de Churchill de desestabilizar el régimen nazi en Checoslovaquia y decidió enviar allí a unos grupos de paracaidistas checoslovacos, entrenados en Inglaterra para misiones especiales. Su objetivo: asesinar a Heydrich y, con ello, subir la moral del pueblo checo y eliminar al posible sucesor de Hitler. Se fraguaba la Operación Antropoide (Operation Anthropoid).
En siguientes entradas comentaremos cómo tuvo lugar dicha operación así como las consecuencias que tuvo la misma.
J.A.T.
