PEPE

¿Sabías por qué los que se llaman José reciben el apelativo de “Pepe” y los que se llaman Francisco, “Paco”?

Partimos de la base de que es común cambiar o variar el nombre de una persona para abreviarlo, lo que se conoce como hipocorístico.

A los José se les suele llamar “Pepe” por José de Nazaret, el esposo de María, la madre de Jesucristo. Debido a que José no fue padre biológico de Jesús, al nacer por obra del Espíritu Santo, tan solo fue su padre adoptivo.

En muchos textos aparece la expresión Santus Josefus Pater Putativo Christi, por lo que la Iglesia Católica utiliza el término padre putativo o pater putatibus, en latín. Con el tiempo ese término acabó en las siglas P.P., por lo que las personas que se llamaban José acabaron recibiendo el hipocorístico de “Pepe”.

También ronda otra teoría sobre el origen de Pepe. Parece que en español había un nombre, Josepe, que aparecen en escritos de los siglos XV y XVI, al igual que , en Italia, existe el Giuseppe, abreviándose en Peppe o Geppe.

El día 19 de marzo, “Día de San José” y también conocido como “Día del Padre”, fue instaurado por primera vez como festivo por el papa Sixto IV en el siglo XV. Y en 1870, fue el papa Pío IX quién lo proclamó Patrono Universal de la Iglesia.

 

PACO

En cuando al nombre de “Paco”, este proviene de Francisco, y su origen se asocia al conocido como San Francisco de Asís, fundador de la orden religiosa de los monjes franciscanos. Dentro de su orden monacal, se hacía llamar Pater Comunitas (en latín, literalmente, Padre de la Comunidad).

Cogiendo las dos primeras letras de cada palabra (PA–ter CO–munitas) y uniéndolas, el resultado acaba siendo “PACO”, acrónimo del título Pater Comunitas.

Con el tiempo, y al igual que pasó con “Pepe”, empezó a llamarse “Paco” a las personas que se llamaban Francisco.

J.A.T.


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