Una iglesia fortificada desempeñaba un papel defensivo en tiempos de conflicto. Estas iglesias se diseñaron específicamente para incorporar particularidades militares, como gruesos muros, almenas, torres y troneras. Otras iglesias se incorporaron en la muralla de la ciudad.

En las zonas de Europa donde hubo numerosos conflictos bélicos –regiones de Francia, Inglaterra, Portugal, España (sobre todo en Aragón), Alemania, o Rumanía- podemos encontrar una gran concentración de este tipo de iglesias. Hay un lugar donde podemos hallar una de las concentraciones mayores de estas iglesias construidas en los siglos XIII-XVI: la región sudeste de Transilvania, en Rumanía. Más de 150 pueblos de esa zona tienen diversos tipos de iglesias fortificadas, y 7 de ellos están incluidos en el Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO bajo la denominación “Pueblos con iglesias fortificadas de Transilvania”.

Patio interior

Patio interior

Durante el siglo XII muchos colonos sajones se asentaron en la región de Transilvania, formando una comunidad muy unida. Tal fue la influencia sajona que Transilvania recibió la denominación alemana de Siebenbürgen (Siete ciudades) en referencia a las 7 ciudades fortificadas principales.

Una de estas iglesias es de la del pueblo de Prejmer, de la que dicen que es la más grande y más fortificada de Europa. No siempre fue así pues, cuando se edificó (1212-1213), solo era una iglesia construida por los Caballeros de la Orden Teutónica, que llegaron aquí tras ser derrotados en Tierra Santa.

Plano de la iglesia fortificada de Prejmer (en rojo: los edificios que ya no existen).

Plano de la iglesia fortificada (en rojo: los edificios que ya no existen).

Una vez que Transilvania sufrió la primera invasión por parte del ejército otomano, los habitantes de este lugar decidieron erigir una fortaleza alrededor de la iglesia y poder defenderse de futuros ataques. Fue un acierto ya que Prejmer fue atacada más de 50 veces durante la Edad Media: turcos, tártaros, mongoles y cosacos, entre otros.

Construyeron una auténtica fortificación de unos 14 m de altura, con torreones defensivos y unos muros de 5-8 m. de grosor, en la que pudieron refugiarse los 1.600 habitantes del pueblo. Cuando era atacada, la recepción era una lluvia de aceite hirviendo. (Ver plano.)

Habitaciones

Habitaciones

Tenía unas 212 habitaciones distribuidas en 4 pisos, y a cada familia se le asignaba una habitación para que se refugiara en caso de ataque. Además, podía resistir largos asedios ya que tenía escuela, almacenes para provisiones (sus torres servían de graneros y almacenes de carne ahumada), su propio pozo para el suministro de agua, y hasta un túnel para poder salir a conseguir más provisiones.

Algo más de 800 años después sigue estando en un buen estado de conservación.

J.A.T.

Agradecimiento imagen patio interior: Myrabella / Wikimedia Commons, CC BY-SA 3.0

Agradecimiento dibujo de la fortificación: Asybaris01, CC BY 3.0