SHINKANSEN

 

Shinkansen -serie 400-Shinkansen significa literalmente “Nueva Línea Troncal” y se refiere al trazado de las vías mientras que los trenes se denominan Chō-tokkyū (“Super Expresos”). Popularmente se conoce como “tren-bala”; puede tener unos 16 vagones de hasta 25 m. de largo, por lo que podría alcanzar los 400 m. de largo, y transportar unos 1.400 pasajeros.

El Shinkansen comenzó a funcionar en 1964 –en coincidencia con los JJ.OO. de Tokio, con una línea corta de unos 515 km de Tokio a Shin-Osaka, a una velocidad de 210 km/h. Posteriormente se fue ampliando a otros trayectos.

En 1986, la velocidad ascendió a 220 km/h; en 1997, llegó a 300 km/h. En la actualidad, este tren aerodinámico puede alcanzar una velocidad de 320 km/h, algo más que el Eurostar, y se prevé que en 2020, se llegará a los 360 km/h.

En el año 2015 se experimentó el “maglev”, siglas en inglés para denominar el “tren de levitación magnética”, los cuales usan imanes con carga eléctrica que eleva el tren unos 10 cm. sobre los raíles, lo que elimina la fricción. La velocidad punta alcanzada en un viaje de prueba cerca del Monte Fuji fue de 603 km/h. Se pretender introducir en Japón estos trenes hacia el 2027, operando a una velocidad de 505 km/h.

Shinkansen (tren bala) 2Puesto que a esas velocidades no se puede confiar en la visión del maquinista, no hay señales en el trayecto. Todo es regulado por un sistema de control denominado ATC (Control Automático de Trenes). El sistema original hacía frenar al tren si se superaba la velocidad máxima; los sofisticados modelos digitales de hoy lo hacen de forma mucho más suave. Esto proporciona la máxima seguridad, y es real ya que, desde que se inauguraron estas líneas de alta velocidad en 1964, no se ha producido ningún accidente mortal por descarrilamiento.

El shinkansen está equipado con el TERRA-S, un sistema de detección precoz de terremotos, ordena en 2 segundos detección de todos los trenes dentro de la zona de riesgo. Como ejemplo, en el terremoto de 2011, este sistema dio el aviso 12 segundos antes de producirse el terremoto, y aunque había trenes circulando a 270 km/h, todos se habían detenido cuando se produjo el mismo.

Una de las líneas, que circula por una zona de mucha nieve en invierno, también lleva un sistema anti-nieve. Este consta de unos aspersores que regulan la cantidad y la temperatura del agua que evita que la nieve se acumule en el chasis, se convierta en hielo, y que este, al caer, haga saltar gravilla que cause daños en el tren.

Shinkansen (tren bala) -serie 700-Hay que destacar su puntualidad –la demora media no llega 0,6 minutos- gracias al sistema COMTREC (Control de Tráfico de Tren Bala Asistido por Ordenador), que proporciona la información requerida para que todos los trenes se mantengan en del horario establecido.

Se ha añadido un sistema de control automático de basculación mediante el cual, en las curvas, el tren se inclina 1º -como máximo- hacia el interior de la curva. Esto contrarresta la fuerza centrífuga y evita que el tren descarrile en una curva cuando va a una velocidad de hasta 270 km/h.

Por otra parte, apenas se percibe el traqueteo característico que tienen los trenes debido a las juntas de los raíles. La razón de esa suavidad es que, mientras la longitud de los rieles normales de acero es de 25 m., los del “tren-bala” es de 1.500 m., careciendo de juntas, pues donde se unen los raíles se coloca una junta flexible que elimina las sacudidas al ajustarse a la expansión y contracción normales.

J.A.T.

Agradecimiento foto cabecera: Rsa