Cirugía sin transfusión de sangre

¿MAS O MENOS CARA?

Una revista jurídica sudafricana señala que, en ciertos casos, la cirugía sin sangre puede ser más rápida, limpia y económica, y que el tratamiento postoperatorio ha resultado en muchas ocasiones más barato y menos largo.

El doctor Aryeh Shander, Jefe de Anestesiología del Hospital Englewood y defensor de la cirugía sin sangre, expone que, con esta técnica, se pueden reducir gastos en un 25%.

Haciendo cuentas, aunque la farmacología utilizada en la cirugía sin sangre pudiera ser algo más cara, si después se hace balance, conjugando que tiene un menor riesgo de infecciones, una menor estancia en UVI y menor estancia en el hospital, los gastos se equilibran y hasta pueden reducirse. También coinciden en esto los doctores Peter Earnshaw (Cirujano y Consultor Ortopédico de Londres) y Mark E. Boyd (Profesor de Ginecología y Obstetricia de Canadá) indicando que con la cirugía sin sangre se ahorra dinero y que convendría utilizarla aunque solo fuera por esta razón.

¿QUÉ HAY DE LOS NIÑOS?

Siendo este un campo sumamente delicado y sensible, se plantea la cuestión si esta técnica quirúrgica es viable para utilizarla con niños.

El Stanford Children’s Health es un sistema de atención médica en la Bahía de San Francisco (California), especializado en Pediatría y Obstetricia, que cuenta con el Lucile Salter Packard Children’s Hospital y afiliado académicamente con Stanford Medicine y la Universidad de Stanford. En base a su experiencia están en posición de afirmar los muchos beneficios que hay para el paciente menor al evitar la transfusión de sangre, entre los que ellos exponen está:

  • Reducir el riesgo de exposición a agentes patógenos. No usar sangre donada elimina el riesgo de contagio de enfermedades como hepatitis, SIDA, Virus del Nilo o sífilis.
  • Elimina el riesgo de crear una respuesta inmunológica potencialmente peligrosa. La sangre es un tejido que es susceptible de ser rechazado por el cuerpo, lo que pondría al paciente en grave peligro.
  • Elimina el riesgo de que dar un tipo de sangre equivocada.
  • Elimina el riesgo de abrumar el sistema circulatorio del paciente al meterle demasiada sangre. Este riesgo, conocido como exceso circulatorio asociado con la transfusión, es una de las causas principales de muertes relacionadas con transfusiones. Es especialmente peligroso en niños ya que tienen mucha menos sangre que los adultos, por lo que el riesgo de abrumar su sistema circulatorio es mayor.
  • Elimina el riesgo de una lesión pulmonar aguda, una reacción inmunológica en la que los pulmones se llenan de líquido, pudiendo provocar un fallo respiratorio.
  • Elimina los posibles efectos adversos a medio y largo plazo.
  • Los niños pacientes, tras ser intervenidos y debido al uso de técnicas quirúrgicas menos invasivas que reducen la pérdida de sangre, pasan menos tiempo con ventilación asistida postquirúrgica, menos tiempo en la UCI y son dados de alta del hospital más rápidamente.

Por lo expuesto en esta serie de artículos, el futuro de una medicina más eficaz y segura está en el presente.

EL OBSERVADOR
Agradecimientos:
Foto Aryeh Shander: Hospital de Manises (València)
Revista ¡AWAKE!
Stanford Children’s Health




La próxima semana abordaremos el tema: “La sangre: El negocio”